Una ventaja mú güena que veo, es que ahora ningún vecino se te mete en el ascensor como quien toma una trinchera al asalto aunque le cueste perder un brazo, o sufrir un desprendimiento de ojete.

Al contrario: ahora casi todos los humanos del mundo occidental dicen aquello de «¡Nah,! ¡Sube, sube! ¡Que no cabemos todos! ya si eso espero yo aquí a que venga el otro, o subo por las escaleras, o hago noche aquí. Ya lo voy viendo. ¡Hala, alegrándome!».

Que en el eleveitor vas tú ná más, pero bien pensao es una cosa muy higiénica que se va regulando por sí misma con excelentes resultados.

Pero si hay algo que está demostrando y demostrará verdadera utilidad ayer hoy y siempre, es el boli Bic. Que si es cristal escribe normal, y si es naranja escribe fino. Que es una cosa totalmente arbitraria que aceptamos sin más, pero no es momento de analizarlo, que bastante polémica hay ya.

Y es que el asunto de tocar pomos, interruptores y botones expuestos al público en general, se va resolviendo también gracias a ese símbolo de nuestra civilización. Eso es pa verlo. Antes usábamos los bolis bic pa rebobinar cassettes, y ahora nos ofrecen otro inestimable servicio, que es apretar los botones del ascensor. Y por si fuera poco, de la que subes y aprovechando el magno adminículo, puedes pintar una pichurrica en la pegatina esa que pone: «Ascensores Murray Bergantiños e Hijos S.L. Marzo de 2020. Revisado por su técnico Honorato, que heroicamente ha entrado en este ascensor de mierda lleno de miasmas y ha hecho como que lo revisaba para después poner esta pegatina con total desgana». Luego cada vecino que suba -o baje, esto ya depende-, se va entreteniendo mientras admira el primor con el que has pintado la pichurrica.

Pero ¡Ojo! Que además el boli bic, también vale para encender la luz del descansillo. Bueno, en mi edificio ni eso, porque se enciende ella sola al detectar seres vivos. Que es una cosa tecnológica muy de agradecer, aunque por su culpa vaya a perder el trabajo media plantilla de Bic. Eso sí: el telefonillo del portal está hecho de sílex y la mitad de las veces no rula. Reputados expertos en paleotelefonillos estiman que es, glaciación arriba o abajo, de mediados del mioceno. Pero no todo va a ser despilfarro y orgasmo comunitario, que tampoco conviene abusar.

Otra utilidad del boli Bic, a mi juicio no menos relevante que las anteriores, es que POR FIN esa vecina que siente la necesidad irrefrenable de sobarte el brazo mientras te habla, como queriendo reforzar el mensaje, puede limitarse a darte toques con la punta del boli Bic, sin necesidad de que medie contacto físico. Es verdad que el hecho de que te estén pinchoteando el brazo con la punta el boli a la par que te aturran, puede producir y/o acelerar en la víctima ciertas ansias asesinas que, no obstante, pueden ser perfectamente resueltas con total educación y sin violencia. Por ejemplo, escupiéndole a la pinchadora en un ojo, así como con segundas. Igualmente, es importante no chupar ni mordisquear el capuchón de los boliBics ajenos. Tampoco se debe capar el capuchón, porque aparte de ser una cosa muy cruel, interferirá con el normal ciclo reproductivo de los bolis Bic, con el consiguiente menoscabo y perjuicio para la sociedad.

Y nada, que por lo demás, deben estar los de Securitas Direct salivando, atentos a que den el parte en la tele con ojillos brillantes y frotar ansioso de manos, a ver si hay suerte y decretan el estado de alarma.

Ahí hay negocio. Se van a forrar.