Estoy a tope con que vuelvan los programas de la tele de toda la vida, pero debidamente revisaos pa que sean programas-croqueta y que le gusten a tol mundo más o menos. O sea, a tol mundo de los que todavía miran pa la tele. Quicir.
Con el Grand Prix ya pasó: ahora la vaquilla Josefina que le gusta la morfina, reside en La Espina y se autopercibe filipina, es un moñeco. Quiero pensar que ecosostenible, reciclado y firfonfante. Como es debido.
En breve creo que vuelve el «Un Dos Tres», que con la inflación y eso será «Un, Dos Tres Cuatro Cinco Seis Siete por el orto te la jinco pero con cita previa y formulario oficial mediante». Si lo presentara el ectoplasma de Kiko Ledgard sería la caña. Pero me da que no.
Que vuelva «Quién sabe dónde», pero que todas las personas aparezcan a la primera, en perfecto estado y en inmuebles con alta calificación energética. Pero ya no lo puede presentar Paco Lobatón porque la Fonderlaien está de una hostia que flipas porque un lupus se le merendó el poni en una finca particular que tenía ella en una pedanía no sé dónde por ahí alantrones. Y ahí ya el asunto proteger al lobo se le atravesó ligeramente por el entrepaten y le pareció buena idea pensar en soluciones para este sensible problema. Se habla de misiles tierra-lobo reciclables y de comercio justo. Para evitar soponcios y disgustos buscarán a un presentador con un apellido menos agresivo. Suena mucho para el cargo Conchi Teletubbie, al ser el teletubbie un ente poco o nada agresivo al que no se le conocen apiolamientos de poni ni nada. Sólo ligeros retrasos cognitivos como llevar perchas en la cabeza y cosas así. Una cosa más en consonancia con la actualidad, vaya.
Para apoyar al sector agroganadero podía volver «Granjero busca esposa», pero reconvertido en «Granjere busca ente que se autoperciba algo o no». Mientras que el granjere se entrega al roneo y el cortejo, un comando de bienestar animal le roba las gallinas, las vacas y las ovejas, y le prohíben cultivar hortalizas fálicas para que se centre en el cultivo de sandías eco de a 7 euros el kilo pero pa que se las paguen a 3 céntimos. Como si fuera ahora, pero en cuqui.
«Saber y Ganar», que es un peligroso nido de listillos, será sustituido por «Lo importante es participar pero solo si ello no te supone un traumita», donde lo importante es no saber distinguir entre el ojete y un cartabón. Al final ganan todos una mierda a repartir entre minorías oprimidas después de descontar el IRPF, el IVA y el ChatGPT. A los resabidillos los mandan a una planta de compostaje pa que se conviertan en abono orgánico para sandías de a 7 euros el kilo y al fin sean útiles a la sociedad.
«Con las manos en la masa» debería volver ipsofacto, pero con la letra de la sintonía cambiada. Nada de «Niña, no quiero platos finos, que vengo del trabajo y no me apetece pato chino». Sería una cosa más rollo «el primero que llegue que eche las mierdas en la tarreña de la Termomís y que apriete el botón de play». Y aluego que apunte en la app el tiempo que ha echao. Si no hay equidad, te explota el celular cuando lo lleves en el bolsillo de delante y te se churrusca la pichurrica o ambas criadillas por la cosa de la paridad. Merecío lo tienes ¡cabronaso!
Los programas de niños que dan la ultraturra cantando «La Zarzamora» como el orto, prohibidos. Que hagan algo de provecho con las criaturas. Dentro de la mierda que apunta ser, hagamos del futuro un lugar mejor. Algo es algo.
Y que vuelva «Caiga quien Caiga», pero sólo si cae gente debidamente incluida en listas oficiales de caíbles. O sea, que vuelva más o menos tal como estaba.
«El precio justo» no puede volver, porque sería redundante y facineroso. Todos los precios YA son justos, y punto. Y el que discrepe va a salir en todas las fotos, pero en Dolby Surround. Verás que bien.
«Salvados», en un alarde de evolución, y considerando que ya no hay «Sálvame» ni «Sálvame Delpús», volverá como «Salvacuatro». Con dos cojovarios Y asunto resuelto porque cuatro es más que dos, excepto cuando no. Que también pasa si es menester.
De otra manera, con esto y que siga habiendo autos de fe de vez en cuando pa entretener al personal, me doy por satisfecho.
Y ya puestos, era mejor dejar el UHF solamente y emitirlo todo ahí en lugar de tanta complicación y tanta zarandaja. Y sobre todo que vuelva la Mirinda.
Aunque con que vuelva la Mirinda, lo demás ya me sobra to. Qué quieres que te diga…
