Quieres ver un programa que, por lo que fuere, te interesa. Vas a la aplicación de la tele en cuestión, te identificas, y ya de mano te calzan un anuncio de algo que te pueda interesar mucho porque saben tu edad, y si te autopercibes hombre opresor, mujer, u otros. En mi caso ya están informaos de que soy hombre opresor de mediana edad. Me tienen perfectamente perfilado. Por tanto el primer anuncio, claramente tiene que ser:

«Con Trampax gold total skinny emoushon, te sentirás limpia. Te sentirás bien. ¡Ahora con un 35% más de emoushon gratis!»

Vamos bien. Yo todo lo que sea gratis, a tope. Esto sin haber elegío todavía el programa que quieres ver. Buscas lo que te interesa. Le das a «ver programa». Empieza el horror:

(anuncio 1 de 3)

-Sale una paya toda sensual caminando lánguidamente por un sitio con una atmósfera como muy vaporosa. Por los andares desganaos se conoce que está cansada o malita de algo. Eso lo mismo es una lavandería china en un sótano, que un sórdido fumadero de escupepacientes en una nave de un polígono de Fuenlabrada. Una tenue luz color salmón lo baña todo. La paya va caminando como si estuviera a punto del orgasming y la sensualidad más tocha. Por alguna razón. Será que va la pobre intoxicada por la fumareda que hay flotando. Pero lo lógico sería que estuviera descojoná de la risa tonta, o que le entrara mucha hambre. Sólo faltan unos choscos colgaos de un palo, curándose como es debido. Con esa densidad de humo, en un par de horas ya estarían pa vender en Alimerka. Pero no hay embutido alguno, probablemente porque se los comió la paya lánguida. Metes en ese antro a uno ocho horas seguidas y queda momificao calidad suprema dejando a los embalsamadores de Ramsés II a la altura del cagar. Le queda al Aifon batería pa mil años mínimo. De repente aparece un frasco de colonia color salmón y con forma muy hortera que da vueltas en el aire. Vaya fumada, colega. Suena una voz en off más lánguida todavía que lo mismo podría decir «¿no tendgá unas monedillas sueltas por ahí, caballego?». Pero no. Dice «Eau de Sumidère. Abundio Godguígues». ¡Amos, no me jodas! Antes los diseñadores se llamaban Cagolina Heguega, Paco Gabán, Yogyio Agmani, o Vagón Dandy. «Abundio Rodríguez»… ¡Home, quita de ahí ¡Payasa! ¡Floja!

(anuncio 2 de 3)

Salen tres personas de diversas complexiones corporales haciendo tuerking de ese que parece que consiste en centrifugar las almorranas. «Con Antonia ultra con alas, será como si no llevaras nada». ¡Ah, vale! Siguen las tres un ratico muy centradas en el centrifugado. Yo encuentro que lo hacen bastante bien. Me entran ganas de ir a comprar dos packs, pero como en el anuncio no salen columpios ni nubes, me enfado muy fuerte porque mis expectativas se han visto defraudadas y ya no quiero comprar ni un pack ni nada.

(anuncio 3 de 3. Empiezo a preguntarme si realmente tengo tantas ganas de ver esa mierda de programa)

Aparece una parejita insoportable de esas que dirían cosas como «un día decidimos hacer el camino de la vida juntos, con la pasión por bandera y la certeza de que los sueños son para quienes abren su alma y su mente a la verdad de un jardín luminoso». Son los típicos que abrirían una tetería y pondrían un cartel en la puerta rollo «Desde 2023». Como queriendo darle solera al asunto. Con escaso éxito. Yo ahí adivino cornamenta y frustración a tutiplén. La hostia sí que va a ser luminosa, zagales.

Total, que los tonticos estos están en una cocina muy cuqui pero petada de pilas de cientos de platos llenos de mierda, que uno se pregunta en qué clase de estiércol en proceso de putrefacción consistía exactamente el menú. Hay constancia de tapacubos de carroceta forestal más limpios de fango. ¿PERO DESDE CUÁNDO NO FREGÁIS, CABRONES? ¡QUE SOIS DOS!

Total, que me informan de las bondades de fregar el vajillamen a mano con un bote diminuto de Feiry ultraconcentrado. En condiciones normales habría que arrancar la costra con cortafríos y maceta tras ablandarla con algún tipo de ácido. Pero no. Con un chorrico fue suficiente y les quedó todo niquelao sin frotar ni un pelo y sin que la esponjilla del estropajo se quedara color chapapote pa siempre. Sospecho que en realidad tiraron toda la vajilla al contenedor de residuos radiactivos y compraron otra. Porque a ver quién tiene estómago pa comer en esos platos. ¡Que os den, pareja de petardos arranantes! Seguro que la tetería la cerráis antes de hacer la primera declaración trimestral de IVA. ¡Flojos!

Y esto si tienes suerte y no se peta la aplicación y vuelve a empezar la tanda de anuncios, por ejemplo por otro que me sale mucho de pruebas de embarazo con pantalla. Pero, ¿pantalla pa qué? ¿Pa echar una partida al Tetris en lo que te dice si estás pregnant? ¡QUE DE TODA LA VIDA SALÍA UNA RAYICA PINTADA EN UN VENTANUCO DEL PLÁSTICO, Y ASUNTO RESUELTO! Sale la rayica = tienes un bollo en el horno. Mira que era fácil…

Y es por esto que si no quieres que te suba la tensión, te vale más descargarte el programa de una página de esas que salen anuncios de personas en paños menores que viven cerca de tí y están ávidas de afuchingar a lo babuino. O de convencerte de que los sueños son para quienes abren su alma y su mente a la verdad de un jardín luminoso ¡HUYE, INSENSATO!