Mechak Labama Lengo, te di mi amistad y mi afecto en Feisbuk animado por tu nombre nada sospechoso y que tanto y tan bien encaja con una señora de mediana edad residente en Mijas con la enseña nasioná ondeando en la foto de perfil. Tus amigos sursajarienses que megusteaban las publicaciones de tu perfil recién creado, fueron la guinda del pastel que hicieron que mi corasón albergara o albergase vanas esperanzas. Nada podía salir mal.
Pero han pasado los días y ni siquiera te has dignado a mandarme un miserable Messenger ofreciéndome un préstamo, o una herencia de la hostia ante tu inminente óbito por un terrible desprendimiento de prepucio sin remedio. O tal vez una sencilla solicitud de Bizum para que pudieras adquirir un frasquito de Loctite especial prepucios desprendidos para aliviar tu doloroso argayu entrepatal.
Ahora es tarde, amiga Machak Mondongo Mango, o como coño se diga.
Por eso veeete, olvida mi feisbus, mi cara, mi casa, y vete a la mierdaaaaa…
Encima de mangui, lerder, protoretarder y poco meticulosa, vaga. Lo tienes to, jamía. Sólo te falta el carné de afecta al régimen.
Así no se puede.
