Hospital Virgen de Wisconsin. Texas. Sala de urgencias. 13:55 horas.
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-¡Rápido! ¡El paciente presenta herida abierta en la región escapuloperitoneal anteroposterior!
-¿Y en la Región de Murcia?
-Pues digo yo que en la Región de Murcia presentaría «hería abiertica en lo que á la regió acapulopiritoneá antaropotarió, acho. ¡Manúa hotia ca trae ar nota ehte, primico!»
-Y le digo más, sanitario Esmiz: en la región de Baden-Wurtemberg, el paciente presentaría «Eine grösen hostionen in der escapulierenperitonisch bundesanteroposterieren regionen.»
-¡A ver! ¡Que venga el doctor Pourriñas!
-¡Servidor de vostedes! ¡Bueno, home bueno! ¿Qué se lles ofrece?
-Necesitamos su opinión, doctor Pourriñas ¿Cómo ve usted a este paciente?
-Non traje as gafiñas, pero ver, véxoo bastante ben. Teñe una feridiña aberta na region escapuloperitoneal anteroposterior, pero o mesmo que lle digo unha cousa dígolle a outra ¿non me entiende? ¡Claro, depende! Haber, haylas…
-¡Cullons! ¡Quina hostiadera que me trae aquest xaval! ¡Això li costarà una dinerada!, ¿eh? que mala sort! Podent fer-se una ferida mes barata, va i es esconya malament… Ascolti, nen! veu preparant la cartera, que en aquest hospital és tot carisimo!
-El doctor Ernest Capdevila, siempre tan atento a las finanzas de los pacientes…
-¡Maldita sea! ¡Qué está pasando aquí! ¿QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ? ¡¡¡DIOS MÍO!!! ¡¡¡MORIREMOS TODOS!!!
¡¡¡PLAF!!!
-¡Hostia! ¡menudo Güilesmiz le ha caído al doctor Farrelson!
-Si, é que traballou de actor de americanadas moitos anos, e de cando en vez hai que darlle unha guantada para que se aplaque, O moi histerico dos collóns!
-¡Vaya! ¿Dónde está la herida del paciente? ¡Parece que se ha cerrado sola!
-Se conoce que es una herida abierta, pero solo de 10 a 2.
-Home claro! pararía para comer. Seguramente abrirá outra vez de catro a oito. Eu marcho, que teño que marchar, e se iso xa volvo cando estea aberta a feridiña outra vez…
-¡Maldita sea! ¡A veces creo que en este hospital no somos verdaderos patriotas…! ¡¡NO LO SOMOS!!
-Farrelson, ti anda xogando, que che calzo outra hostia que che avío…
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Fin