Lo he pensao un poco, y eso de que «ha cambiado todo porque los tordillos de pico azul han vuelto a surcar los cielos de Cintruénigos del Marqués» es una trola tan bonica como tocha. Que mola mazo que los tordillos hayan vuelto, sí. Que por cierto, que alguien mire por qué los tordillos me traen el pico de esa guisa.
¿Azul? ¿Pa qué? ¿Es de natural un pájaro rarito?, ¿O es una cosa de influencer gilipoller con mucher tiemper librer? Los pájaros en cuestión ¿Ya tenían el pico azul antes de que fuera tendencia en Instagram? A mí no me jodas. La naturaleza es mucho de simplificar y no hace tontás porque sí. A no ser que el pico azul les sirva para machihembrar con más garantías. Ahí no digo ná.
A lo que voy: que el asunto en general, cambiar, lo que se dice cambiar, lo justito pa echar al guiso. Si acaso, cambian las formas.
Ejemplo:
«¡Paco! No arrimes hortaliza, que estamos en cuarentena vírica ¡So inconsciente!»
Esto, aunque no lo parezca, es el «Parta pa’llá, que me duele la cabeza» de toda la vida, pero disfrazao de cosa científica. O sea, que la ciencia no sólo no resuelve este delicado asunto, sino que lo legitima ¡Cagüen!
Pero lo que es el tema machihembre y guarrerida española en general sigue por sus derroteros, y con los mismos grandes éxitos de siempre. Ahí se prevé que el estado de alarma perpetuo que afecta a este negociado se prolongue en el tiempo unas cuantas glaciaciones más.
Para los no expertos en glaciaciones: que lo de no enhebrar va pa largo. Paciencia, y tened mucha fe (jojojojojo)
Lo cual me lleva a pensar, a la vista de los datos demográficos, que una de tres: o a las chinas nunca les duele la cabeza, o las engañan como a chinas, o no han tenido la picardía de importar nuestra milenaria técnica occidental, con las debidas adaptaciones culturales:
«¡Xiao Pin! No alimes chopsuey, que hay cualentena ¡So inconsciente! ¡Mejol tú toma infusión de mulciélago y tapita pangolín!!» .
O eso, o los anticonceptivos chinos que usan los chinos son made in China, cosa tan terrorífica como plausible. Nos ha jodido mayo.
Y ya puestos a plantear teorías de mucho miedo, imaginemos un hipotético escenario en el que todos los condoncillos, parches de estrofoides, diuses y demás elementos antibombo de allí, los fabrique todos el mismo chino que los test balatos de detectal el colonavilus, pelo poco. De ahí sale una peli del copón:
«A raíz de que los chinos ya no caben en China por el chiny boom, y ya se van desbordando por los laos del mapa yendo a caer a la mar océana cada vez que uno da un codazo, el sargento retirado James Sablinsky viaja a China para resolver la grave crisis. Pero el malvado Jin Kun Xiao, fabricante de tupergüares y productos sanitarios de bajo coste, tratará por todos los medios de impedirlo.»
¿A QUE ACOJONA?