En redes sociales, todos conocemos al menos un espécimen al que he bautizado como «Capitán Lectoescritura». Son los superhéroes de la mentecatez suprema. El caviar Beluga de la estupidez. El cinco jotas de la remamahuevada, la majadería y la ultraidiocia.
Se trata de un ser analfabeto integral pero, en su ignorancia, no lo sabe. Es importante señalar que lo suyo no se debe a la falta de oportunidades, ni mucho menos. Se debe, precisamente, a que aprovecha al máximo cada oportunidad que se le presenta de ser más y más retrotónter del ojete. Son los vigoréxicos de la tontez alfa.
El Capitán Lectoescritura es experto en entenderlo TODO al revés. Posee el superpoder de explicar con una ratio de tres faltas de ortografía por sílaba, que la publicación que está criticando dice exactamente lo contrario a lo que él cree que dice. Es decir, dentro de sus escasas posibilidades, nos enseña que la publicación dice exactamente lo que la propia publicación dice. Pero sin darse cuenta. Es como el que pisa el balón, y al estamparse de morros se deja los dientes en el suelo, pero debido a la vibración mete gol en propia puerta y lo celebra besando su camiseta sobre el escudo de Desguaces Corrochano.
-jajajajagagaga! heso esta mal. la patata es un tuverculo, hijnorantes
-Es que ahí dice precisamente que la patata es un tubérculo, angelico mío. Se deduce del título: «La patata: ese tubérculo del que usted me habla».
-Hes cuestion de opiniones, gagajajagaga! ¡HABER SI APRENDEMOS ISTORIA!
-Ya de paso, a ver si aprendes un poquico de ortografía en tus extensas lecturas.
-pa que kiero hortografia si no tengo uerto? si es ke no dais pa mas, hanalfavetos jagagagajaga!
De lo cual se deduce que los especímenes de Capitán Lectoescritura se reproducen como sus primas hermanas las amebas, debido a que, aunque tienen depredadores naturales (los libros y la ilustración), desconocen su existencia. Pero a la vez recomiendan a los demás que lean libros y se ilustren porque, en su infinita faltosez, los tienen como balones de Nivea sobreinflados.
Si no conoces a ninguno, haz esta prueba infalible: ¿justificas tu ortografía mierder «porque hesque tengo los dedos grandes y no me caven en el teclado del mobil»? Pues entonces es que el Capitán Lectoescritura eres tú.
Y por esto se explican cienes de miles de cosas.